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Hoy creo haber superado una obsesión. Algo que me tuvo completamente trabado durante muuucho tiempo, de repente parece haberse licuado, evaporado, muy de a poco aunque inexorablemente se ha ido esfumando. Y entonces me doy cuenta de que ya no estoy pendiente de todo aquello que otrora significó un mundo laberíntico y absorbente para mi. Y ya no más los temblores, ya no más las ilusiones, ya no más las averiguaciones, ya no más las persecuciones, ya no más las eternas soledades, ya no más las eternas pérdidas. ¿Para qué?
Hay una película de Woody Allen que es excelente, Crímenes y Pecados. Un médico con una familia re establecida, de una posición social de cierta jerarquía y demás tiene una amante. La amante se le pone pesada y el tipo se la quiere sacar de encima a toda costa, no quiere saber más nada de esa mina que le arruina su vida cuasi perfecta que supo conseguir. Está desesperado. Y recurre a su hermano que siempre anduvo en cosas medio turbias para que se haga cargo de ella (take care), lo cual termina convirtiéndose en que la mata. La mina no tenía ni familia ni nada con lo cual más que un par de averiguaciones que hace la policía el tema no tiene demasiadas repercusiones. Su vida sigue tal cual como antes, o mejor aún. Las cosas le empiezan a salir muy bien profesionalmente, se casa su hija y todo 10 puntos. Lo loco de toda la historia es que no siente culpa, digamos se ve un poco trastornado al principio cuando se da cuenta de lo que hizo pero un día se despierta tiene a su esposa, su hija, su laburo y todo lo demás; y simplemente deja de sentir culpa. Es como que de a poco se da cuenta de que se sale con la suya. Totalmente impune. Supongo que a mi obsesión la voy a extrañar. Eso que pensás que va ser parte de vos para siempre y que va a condicionar tu personalidad eternamente, se va yendo y es casi como si te sintieras impune de repente, ¿por qué no sufro más mi obsesión?. Psicológicamente es un gran avance supongo, por que ahora voy a poder vivir mejor. Pero quien no extraña esas remeras hechas mierda que si te las ponés parecés un villero pero que te hacen recordar algo, y que cuando te las ponés sabés exactamente como te vas a sentir. O esos temas que cada vez que los escuchás te hacen pasar por el mismo cúmulo de emociones. ¿No sentirías un duelo terrible si ese tema resulta que ya no te hace pasar por ningún lado, que se ha convertido en un tema más y que incluso decidís fowardearlo, por que no entendés cómo puede ser que te gustaba tanto? Y entonces me pregunto, no será que me he curtido, que de tanto trajín en mi vida, me curtí de tal manera que ya nada me modifica, nada me conmueve y que aquello que era excluyente y mortificante ahora es solamente un detalle, un instante de interés, que por ahí me retrasa unos minutos pero ya no me desvía.

Supongo que entonces que ya puedo archivar todo eso. Ponerlo todo en una linda carpetita titulada "Retrato de una obsesión" y olvidarme al fin.